La compositora y violista danesa Astrid Sonne crea paisajes sonoros donde lo electrónico y lo acústico conviven en un equilibrio hipnótico. Siempre en evolución, su universo musical encuentra en Great Doubt (2024) un nuevo matiz: su propia voz se suma como un instrumento más, desdibujando los límites entre el sonido y la emoción.
La viola, su fiel compañera desde la infancia, se integra de manera orgánica en sus composiciones, desde los sutiles pizzicatos de “Almost” hasta la intensidad rítmica de “Give My All”, donde las cuerdas se entrelazan con metales digitales y flautas etéreas.
La apertura en la cafetería será llevará el nombre de Dulce, una artista colombiana afincada en Barcelona, cuya sensibilidad única le permite fusionar estilos con una imaginación inigualable. Sus DJ sets construyen una narrativa envolvente, guiando al público a través de un viaje sonoro impredecible, cuyo destino solo ella conoce.